“Periodista
Estoy de acuerdo con usted, comisario jefe. Creo que un escándalo de ese calibre daría prestigio a la policía. Los ciudadanos tendrían la sensación de vivir en un Estado mejor, con una justicia menos injusta…
Loco
Claro, ¡y sería más que suficiente! ¿El pueblo pide una verdadera justicia? Pues hacemos que se conforme con un poco menos de injusticia. ¿Los trabajadores gritan basta ya de explotación? Pues procuraremos que sean un poco menos explotados, pero sobre todo, que no se avergüencen de serlo… ¿Quieren que desaparezcan las clases? Pues haremos que no haya tanta diferencia, o mejor, que no se note tanto. ¿Quieren la revolución? Pues les daremos reformas, los ahogaremos en reformas… mejor aun, en promesas de reformas que jamás les daremos.
[…]Mire, al ciudadano de a pie no le interesa que la mierda desaparezca, le basta con que se denuncie, estalle el escándalo y se pueda comentar. Para él, esa es la verdadera libertad y el mejor de los mundos, ¡aleluya!”.